Miel de Abeja: resultado de un proceso sostenible

En Los Altos - Coffee Market nos consideramos una empresa que tiene su visión puesta en el café de especialidad, sin embargo, como tal vez ya te diste cuenta, también puedes encontrar miel de abeja en nuestra tienda en línea. Este producto, no es solo un complemento comercial, es resultado de una decisión por cuidar nuestro planeta.

Nuestra miel de abeja es resultado de un proceso para obtener café orgánico, en el cual promovemos la polinización del cafeto a través de las abejas. Hoy, en el Club del Café Mexicano, te platicamos sobre la polinización natural, la importancia de las abejas para el balance del ecosistema y la relevancia de la miel de abeja para nuestras comunidades indígenas.

LA POLINIZACIÓN NATURAL 

Todo se remonta a la decisión de producir café orgánico certificado. Para cumplir con las diferentes certificaciones se requiere modificar un sin fin de procesos poco amigables con el medio ambiente y optar por implementar procesos naturales. Uno de estos procesos, es dejar la polinización artificial del cafeto para promover la polinización natural.

La polinización es el proceso por el cual se reproducen las plantas, en donde se transfiere polen de la parte masculina de la flor a la parte femenina, para así lograr la producción de semillas y frutos. Las plantas, al ser inmóviles, requieren de un tercero para que ocurra la polinización. La polinización natural, ocurre a través del viento, del agua, así como de insectos, mariposas, y aves, pero principalmente, de abejas. En la agricultura moderna, se ha optado por acelerar el proceso a través de una polinización artificial, en donde existe la intervención del humano y por ende, se rompe el ciclo natural del ecosistema.

LA IMPORTANCIA DE LAS ABEJAS

La reproducción de las plantas no solo es vital para obtener nuestro alimento, sino también del que dependen muchas otras especies animales. Por esto, las abejas son de suma importancia para mantener un sano balance de nuestro ecosistema. Estos insectos, viajan grandes jornadas visitando flores para recolectar su alimento y el de sus colonias, al moverse en el interior de las flores, sus pelos recogen fácilmente miles de gránulos de polen que después dejan involuntariamente en otra flor.

Se estima que cerca del 90% de las flores silvestres y cerca del 75% de los cultivos requiere un polinizador natural como las abejas, aún así, estamos acabando con ellas. La agricultura intensiva, los cultivos transgénicos, el uso de plaguicidas y fertilizantes artificiales, la contaminación y el cambio climático, están reduciendo las colonias de abejas y con esto, irónicamente, aumenta la necesidad de utilizar la polinización artificial, creando un círculo negativo que pondrá en riesgo la supervivencia humana.

NUESTRA MIEL

Conscientes del gran problema que estamos creando con la agricultura moderna, nace un intento de reducir nuestro impacto ambiental. Al implementar la certificación orgánica, nuestros socios caficultores adoptaron la polinización natural, y aunque en un principio era un requisito más, con el tiempo se volvió una oportunidad para generar un sustento económico para cientos de familias y para preservar lo más importante para estas comunidades, su tierra.

Nuestra miel de abeja es trabajada por apicultores indígenas tseltales y tsotsiles en la región de Los Altos, en Chiapas. Nuestra miel es orgánica certificada, es pura, ya que no está mezclada con otras sustancias y es cruda, ya que no está calentada a más de 30 grados, con lo que cuidamos todos los nutrientes. Nuestra miel es multiflora, es decir, que es resultado del néctar que recogen las abejas de distintas flores.

POR ÚLTIMO...  

Nuestra miel es un claro ejemplo de que respetar y proteger nuestro ecosistema si es viable, y si puede ser negocio. Buscar reducir nuestro impacto ecológico ahora empodera a mujeres y hombres indígenas a obtener un ingreso económico a través de la apicultura. Como sociedad, podemos implementar buenas prácticas que sean más amigables con el medio ambiente, como cuidar a las abejas, ya que sin ellas, el mundo estaría condenado a desaparecer.

Con amor, para México...